Danzando hacia la paz

Con terapia de baile y movimiento, Dunna presenta alternativas para caminar hacia un mejor futuro en Colombia.

Por Natalia Quiñones

Colombia. Belleza y exuberancia en medio de pobreza y violencia. Un mercado emergente de gran potencial, pero un panorama de transición hacia la paz que aún se encuentra difuso por la presencia continuada del conflicto en muchas de las áreas rurales. Y la juventud, especialmente en las zonas más pobres, atrapada entre la actitud defensiva de los mayores que vivieron el conflicto y la promesa de paz en un futuro cercano. Lo más grave para ellos es que no existen alternativas visibles para enfrentar este dilema existencial, cuya solución determinará la manera en que cada uno caminará el mundo en el futuro.

La falta de soluciones puede crear seres que caminen el mundo como un campo de batalla, buscando destruir antes de ser destruidos y que perciban una amenaza constante en la diferencia, fragmentando lo ya fragmentado y eternizando el ciclo destructivo del conflicto armado. Una solución exitosa, en contraste, creará adultos flexibles, incluyentes, tolerantes frente a la diferencia, con iniciativas  creativas y no violentas para la solución de conflictos, con un caminar pacífico y constructivo, propio de un mundo que se reescribe después de una fragmentación característica del caos de la violencia armada.

Dunna, entidad sin ánimo de lucro creada en Bogotá, Colombia, ha decidido apostar por la posibilidad de convertir la fragmentación en reconciliación, a través de la danza y el trabajo con el cuerpo. No solamente en el sentido tradicional de la justicia transicional, sino también en el sentido de reconciliar la mente con el cuerpo y las emociones, reconciliar el pasado con el futuro y reconciliar la violencia que vivieron (y nos transmitieron de alguna manera) nuestros ancestros inmediatos con la posibilidad de construir una sociedad en paz aquí y ahora.

La apuesta es revolucionaria, invierte los esquemas tradicionales que intentan lidiar con el conflicto de arriba hacia abajo, de la mente hacia lo físico. Dunna trabaja de abajo hacia arriba, desde la materialidad del cuerpo palpable y omnipresente en la cotidianidad del ser, hacia la mente que esquematiza, clasifica e intenta explicar lo que ocurre fuera de ella. Y con esta inversión de la visión del conflicto, trabajamos en soluciones a largo plazo que realmente cambien la forma de andar en el mundo de los seres que vienen.

Para más información sobre el trabajo de Dunna, por favor visiten nuestra página web en www.dunna.org.

 Natalia Quiñones estudió derecho y filosofía, le gusta el yoga, la danza y el mar. Es fanática de los árboles e intenta vivir de abajo hacia arriba.